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lunes, 9 de agosto de 2010

BRUJERIA EN LOS OBJETOS.- CAPITULO XXVIII DEL LIBRO BRUJERÍA AL DESCUBIERTO EN LA IGLESIA.

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CAPITULO XXVIII
BRUJERIA EN LOS OBJETOS.-

     La brujería en los objetos es más fácil para los brujos y brujas y se las proporcionan con diferentes motivos a los que buscan sus servicios. Hacen brujería en plantas especialmente coludos y rosas, flores, perfumes, anillos, pulseras, aretes, adornos de salas, de cuartos, juguetes especialmente muñecas, dinero para maldecir finanzas, santos, imágenes de cualquier tipo, cuadros de pintura, paisajes etc., fotografías, camas, ropas, prendas íntimas, cortinas, sábanas, zapatos, utensilios de cocina, muebles, roperos o guardarropas, en cosas atractivas pero también en cosas que no revisten gran importancia por lo que se disimulan perfectamente, nadie imaginaría que dentro de ese objeto, existe una obra de brujería para desgracia, amarrar amorosamente la persona a otra, destruir, causar locura, matar, abortar, causar impotencia, lujuria, obsesión etc.
     Todo objeto tocado por los brujos está pactado, es como si tuviesen tuberculosis y si otra persona lo toca se contamina, agregado a esto el pacto, oración o conjuro que se hace sobre los objetos depositando espíritus malignos en ellos.
     Jehová de los Ejércitos aborrece a muerte la brujería o hechicería, me revela el señor lo que he dicho al principio de este libro, la brujería o hechicería existe desde que los ángeles caídos pecaron contaminándose al tener relaciones con las hijas hermosas de los hombres, enseñándoles a los hombres secretos de hechicería o brujería y otras cosas malas, a estas mujeres producto de las relaciones con los hijos de Dios, que fueron ángeles que dejaron su dignidad y abandonaron las moradas celestiales siendo castigados en prisiones eternas, les nacieron humanos deformados de gran tamaño que fueron llamados gigantes. “que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años. Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre. Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón. Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho.” Génesis 6: 2-7.
     Está obra de Satanás y sus demonios practicada por los humanos es milenaria y el pueblo de Israel la practica desde los primeros tiempos de su escogencia como pueblo de Dios, como pueblo santo escogido del Altísimo. Por eso en los primeros tiempos de la ley mosaica, el castigo que mandó Dios a las hechiceras a través de Moisés fue la muerte, porque era practicada principalmente por mujeres que fueron también las que habían aprendido primero y estas enseñaban a los hombres “A la hechicera no dejarás que viva.” EXODO 22: 18
     En nuestra consejería nos cuenta una hermana cristiana que a su marido le hacía brujería en los zapatos para que se fuera de la casa, le echaba un polvito todos los días para tal fin a y así de las mismos hermanos escuchamos brujería en las camas debajo del colchón o la almohada con diferentes fines.
     Las pulseras y anillos de cualquier tipo cuando están embrujados o pactados son ataduras de amor fuerte para que hombre o mujer caiga en cualquier momento en poder de la persona que hizo esta obra de maldad, sintiéndose atraída cada días más hacia la otra persona, sin ser amor. Sin saber porqué.
     Objetos con fuerte presencia como adornos de sala o floreros, imágenes de cualquier tipo, pinturas, esculturas griegas o muñecos tipo Buda, ídolos o antigüedades, estrellas de cinco picos dibujadas o en adornos o pinturas o ropas, en trastos u objetos de cocinas, indios tallados en puertas o muebles etc. Son de fuerte presencia y llegan a tomar dominio sobre la persona hasta poseerla para causarle locura, porque la persona percibe realmente ruidos, olores, voces, risas, sombras pero nadie le creerá y la enviaran a un psicólogo o siquiatra, pero todo lo que ella percibe es real, a veces los niños son atormentados por los espíritus de brujería y hechicería pero como no se pueden expresar no entenderán su inquietud, más grandecitos podrán decir lo que perciben pero no les creerán.
     El anillo de matrimonio tiene una gran importancia en el mundo espiritual. Muchos casados lo utilizan como una marca o una muestra de que se está unido a otra persona legalmente o religiosamente. Pero su significado va más allá de esa trascendencia lógica del pensamiento occidental, europeo y mundial. La mayoría de hebreos o judíos le dan la importancia que realmente tiene.
     El señor Jehová de los Ejércitos me reveló la importancia de la santidad del anillo de matrimonio a través del sufrimiento de mi esposa por haber prestado mi anillo de matrimonio. Cuando no conocía a Dios, mi vida estaba revuelta en la inmundicia de la carne, de sabanas de moteles y vehículos utilizados para fornicar antes de casarme y adulterar cuando me casé, una de esas mujeres malignas que Satanás utiliza para dañar los matrimonios me pidió confiara en ella y le demostrara esa confianza prestándole mi anillo de matrimonio con la seguridad que me lo devolvería al día siguiente.
     Era demasiada la idolatría hacia esa hija de Satanás, que también tenía en tinieblas su hogar que le presté mi anillo de matrimonio, donde tenía grabado el nombre de mi esposa, que ahora es profeta de Dios. En ese entonces yo no creía en brujería, ni imaginaba siquiera el mal propuesto, el riesgo que tomé según yo, fue que no me lo devolviera, pero Satanás y sus hijas son más astutos que los hombres sin Cristo en el corazón. Para mi asombro efectivamente al siguiente día, al verme, de inmediato me entregó el anillo, cumpliendo su promesa y respondiendo a mi confianza.
     Esta misma mujer me había regalado un anillo de oro sencillo con la imagen de la virgen de Guadalupe que yo usaba permanentemente en mi mano derecha, siendo una forma de estar atado a ella, mi esposa era menos importante que esa mala mujer, no me importaba su sufrimiento, ella padecía humillaciones, migrañas, ataques de histeria, depresiones, pero no se iba como yo quería, pero sin ser el que la echara, que se marchara por su propia cuenta, para no tener remordimientos, porque sabía que era y es una buena esposa.
     Ella sufría, se escapaba de morir producto de la brujería, yo pensaba que eran necedades como me lo decía el diablo vestido de mujer. Mi esposa oraba, clamaba. Su vida no era vida. Dios tenía un propósito. Un propósito grande y milagroso, tan increíble, que mucha gente aún no cree lo que mi Señor Jehová de los Ejércitos hizo conmigo, con mi esposa, con nuestro matrimonio que ahora es un Ministerio de Dios.
     Mi linda esposa empezó a padecer desmayos y enfermedades raras, depresiones, resentimientos provocando en ese lapso de tiempo dos abortos complicados, relatados en este libro, que casi la llevaron a la muerte, médicos sin Dios, ateos, se declararon sorprendidos de las manifestaciones de esos abortos por embarazo ectópico y embarazo cornual, estaban fuera de la literatura médica en su comportamiento específico, así fueren etiquetados, pero había algo raro en esos abortos y complicaciones fuera de lo común, y salvarse de morir fue un milagro.
     Cuando Dios habló a mi vida audiblemente, algo que mucha gente no cree y piensa que estamos locos o tenemos un espíritu malo dentro de nosotros, el Señor me dijo en ese momento de oración con Él, que me deshiciera del anillo porque estaba afectado de brujería, obedecí inmediatamente y fenómenos extraños empezaron a suceder, porque los demonios alrededor de ese anillo se perturbaron, pero mi esposa empezó a mejorar notablemente sin medicinas, con los medicamentos nunca mejoró, por eso yo creía que eran actuaciones para manejarme a su antojo.
     Yo le había dado derecho a Satanás y sus demonios sobre mi matrimonio, por obra de brujería lo habían pactado para destrucción y muerte de mi esposa. Al entregar mi anillo la protección espiritual de esposo a la esposa se había lesionado y los demonios la atacaban fácilmente hasta postrarla por obra de maldad.
     Yo rompí el círculo de protección que significa el anillo alrededor del matrimonio. El anillo de matrimonio no se puede prestar, ni regalar, es un error grave que los demonios aprovechan con creces. Muchos cristianos acostumbran a sembrar sus anillos según ellos para el Reino de Dios o para otro matrimonio cuando las personas no tienen, este es un acto de envanecimiento sutil, que el enemigo pone en la mente de la persona para fracturar la unión matrimonial, pensando que hacen bien a otra pareja y es sin saberlo a costa de su propio matrimonio.
     Nunca prestes tu anillo de matrimonio. Siempre debes usarlo. Nunca regales tu anillo de matrimonio. Nunca siembres tu anillo de matrimonio como ofrenda. Es tu protección, la protección de Dios a tu matrimonio a través de ese anillo sagrado que significa el círculo de Dios alrededor de nosotros donde Satanás no puede entrar aunque quiera. Así el enemigo no te podrá tocar.
     Dios me mandó hacer nuevos anillos y no utilizar para su elaboración el anillo que portaba mi esposa. Gloria a Dios por su bondad y las revelaciones a su pueblo.
     “En el casamiento judío, el anillo representa mucho más que un simple símbolo: es parte integrante de la ceremonia. Es la entrega del anillo, y no las bendiciones que pronuncia el rabino, lo que transforma a los novios en marido y mujer.
     Un dato interesante es que para que el matrimonio sea legítimo, el anillo debe ser propiedad legal del novio.
     El anillo es comparado con la Torá: Así como el anillo es infinito, también el lazo de la Torá entre Dios e Israel es infinito. Así, Dios dijo a los israelitas: "Y te desposaré conmigo por siempre"(Oseas 2:21). De la misma manera, cuando el novio le entrega el anillo a la novia, simboliza que, como el lazo entre Dios e Israel es eterno, también es eterno el lazo de amor entre marido y mujer.
     El anillo simboliza también la protección que el marido le da a su mujer. Así como el anillo rodea al dedo, el aura de protección del marido rodea a su mujer. Esto está íntimamente ligado con el aura espiritual que le llega a la mujer desde el marido, y que le da una conciencia de sí completamente nueva.” (Judaísmo, bodas judías: el anillo)
     Padre Celestial en el nombre de Jesús, vengo cancelando toda obra de brujería en los objetos que hay en mi casa los cuales me dispongo a quemar y a quebrar, cancelo toda maldición que hay sobre esos objetos y sobre mi vida, mi hogar, mi matrimonio, cancelo toda maldición y toda obra de brujería sobre mi anillo de matrimonio por haberlo prestado o dejar que dijeran alguna maldición sobre él sin que yo me diera cuenta. En el nombre de Jesús deshago todo pacto de brujería o hechicería sobre mi vida y sobre mi matrimonio que se hizo a través de esos objetos trabajados que están en mi casa, los cuales quemo y desbarato en este momento. Me dispongo con tu bendición Padre Santo a renovar mis anillos de matrimonio los cuales te ofrezco desde ya. Todo en el nombre de Jesús.